Al igual que nosotros avanzamos, lo hace la investigación, el desarrollo y la fabricación de productos. Formulas mejoradas en productos de siempre y que están y estarán en nuestro neceser: los desodorantes.
Sin embargo, el uso de compuestos en la industria cosmética en ocasiones innecesarios provoca lo que yo llamo una desvirtualización de los compuestos químicos que no hace más que confundir al consumidor.
En el tema de hoy hablamos de las tan conocidas sales de aluminio, usadas con un fin determinado y sin embargo presentes en muchos de nuestros cosméticos por que sí.
¿Sabemos qué son? y ¿por qué está el aluminio en el punto de mira de los científicos?
Si hay algo que nos preocupa en nuestro aseo personal es el olor, y si es el producido por nuestras axilas aún más.
¿Cómo y de dónde viene el sudor?
Seguro que las conoces, las famosas glándulas sudoriparas: ecrinas y apocrinas. [1]
De manera general y sin entrar demasiado en detalle, podríamos decir que la secreción debida a las glándulas ecrinas esta ligada a mecanismos de defensa de nuestro cuerpo para mantener una temperatura corporal de unos 37°C frente a las altas temperaturas, cuadros de fiebre, o estrés emocional, y como salvoconducto para eliminar tóxinas, siendo este sudor incoloro, líquido e inodoro y rico en sales como sodio o potasio.
Las glándulas apocrinas sin embargo están relacionadas con procesos hormonales, crecimiento, pubertad, menstruación o embarazo y generan un “moco” más viscoso secretado junto con el sebo (glándulas sebáceas), siendo también inodoro pero rico en ácidos grasos, ésteres cetéreos y polisacáridos.
¿Por qué olemos?
Muy sencillo. Se produce por la reacción con las bacterias y microorganimos que se encuentran a la salida de nuestras glándulas y se alimentan principalmente de polisacáridos, que junto con la descomposición de proteínas causan ese «desagradable» olor.
Tras esta mini clase ¿qué hace la industria cosmética para evitarlo?
Muy fácil, neutralizar los olores.
¿Cómo?
- Usando perfumes o aceites esenciales que neutralicen y enmascaren los olores (Desodorante)
- Usando agentes antibacterianos, como son el alcohol (Desodorante)
- Reducir la secreción del sudor, usando agentes antiperspirantes como las Sales de Aluminio (Antiperpirantes/Antranspirantes)
¿Cuál es el fin de cada uno?
Como decíamos al principio el uso indiscriminado conduce a la confusión y nos equivocamos en cual es el destino de cada cosa.
Los desodorantes, son los que están pensados para el casi todo el mundo o situaciones dónde el sudor no es extremo y simplemente usados para frenar el olor corporal. Mientras que los antiperspirantes tienen como fin reducir la secreción, por así decirlo taponar parcialmente la salida del sudor y son usados en casos dónde la sudoración exceda la “normalidad”.
¿Deberíamos entonces usar TODOS antitranspirantes? NO.
Cómo identificar las sales de Aluminio en nuestros desodorantes
Las más usadas son:[2]
- Aluminium chlorohydrate (ACH)
- Aluminium zirconium octachlorohydrate/trichlorohydrate (AZCH)
Uso de ACH/AZCH de manera prolongada
Bien, aquí es donde nace la polémica de usar o no usar sales de aluminio.
En los últimos años diversos artículos se han publicado donde se relaciona la acumulación de aluminio con enfermedades degenerativas, en la aparición del cáncer de mama y con la enfermedad de Alzheimer. [3,4] Pero hay que remarcar, que el aluminio no solo se encuentra en nuestros desodorantes, si no también en el agua, el los utensilios de cocina o en los alimentos. Y que su absorción por estos medios puede ser incluso mayor que a través del uso de desodorantes.
En el caso de la cosmética la presencia de sales de aluminio se ha vuelto un tema un poco controvertido. Bien por desconocimiento, confusión o como otro reclamo publicitario más para aumentar la venta de productos catalogados «sin aluminio».
Si bien existen artículos que relacionan la toxicidad de Aluminio con el cáncer mama debido a que pueden alterar los estrógenos, no existe actualmente relación alguna entre la aplicación continuada de antitranspirantes como factor de riesgo para estas enfermedades, lo que desvincula su toxicidad con las diferenes patologias. [5] Además hay que mencionar hasta ahora, la aplicación cutánea a través de los antitranspirantes no es suficiente para acumular tanto aluminio en nuestro organismo.
¿Cómo está regulado?
La FDA (Food&Drugs Administration, USA) establece para los antiperspirantes un 25% de Aluminium Chlorohydrate o un 20% para el Aluminium zirconium octachlotohydrate. [6, 7]
A nivel europeo tenemos la Comisión Europea, donde no se indica ninguna restricción para el uso de sales de aluminio chlorohydrate al contrario que en USA, y las sales Al-Zr (aluminio circonio octachlotohydrate) tienen también un límite del 20 % de la sal anhidra (sin agua) y un máximo de un 5.4 % de circonio en sus formulaciones. [8, 9, 10]
*Al-Zr= aluminio-circonio
[1] Cosmetología de Harry, J. B. Wilkinson,R. J. Moore, Ed. Diaz de Santos S.A, 1990.
[2] Poucher’s Perfumes, Cosmetics and Soaps , Hilda Butler, Springer, 1993.
[3] (a) Link between Aluminum and the Pathogenesis of Alzheimer’s Disease: The Integration of the Aluminum and Amyloid Cascade Hypotheses, Masahiro Kawahara,Midori Kato-Negishi, Int .J. Alzheimers Dis. 2011, 276393.; (b) Aluminum and Alzheimer’s disease: after a century of controversy, is there a plausible link? L. Tomljenovic, J. Alzheimers Dis. 2011, 23, 567-98.
[4] (a) Aluminium and human breast diseases, P.D. Darbre , D. Pugazhendhi, F. Mannello , J Inorg Biochem., 2011, 105, 1484-8; (b) Aluminium and the human breast, P.D.Darbre, Morphologie. 2016, 100, 65-74.
[5] Breast cancer & deodorants, Blogpost from Cancer Research UK.
[6] Code of Federal Regulations, FDA.
[7] Antiperspirant Drug Products For Over-the-Counter Human Use; Final Monograph, FDA (2003)
[8] Official Journal of the Europe (2006/257/EC)
[9] Cosmetics legislation, Vol.1, 1999 (European Comission)
[10] SCCS/1525/14, Revision of 18 June 2014, Scientific Committee on Consumer Safety; Opinion on: the safety of aluminium in cosmetic products (European Comission)